Durante la madrugada de este lunes, diversos locales y domicilios particulares de militantes sociales fueron allanados violenta y sorpresivamente por la policía federal.
Según trascendió en los medios, los allanamientos fueron motivados por actuaciones judiciales contra dirigentes del Polo Obrero, de Barrios de Pie y otros grupos que se iniciaron por denuncias realizadas en la línea 134 que habilitó el Ministerio de Seguridad.
La línea 134 fue impulsada por el gobierno de Milei como parte de una campaña de desprestigio hacia las organizaciones sociales, con el fin de preparar el terreno para acciones represivas contra las organizaciones piqueteras.
El Frente de Organizaciones en Lucha, una de las organizaciones que fue blanco de este ataque del Gobierno, difundió un audio en el que Carlos Fernández Kostiuk, uno de sus referentes, cuenta la espeluznante situación que vivió junto a su familia. “Nos rompieron la puerta, en el caso de mi familia, entraron por la noche donde estaban durmiendo mis hijos, me tiraron al suelo, nos encañonaron”, relató, y precisó que “buscaban Dispositivos electrónicos Celulares o computadoras”.
“Lo que quieren hacer es que las organizaciones sociales no sigamos haciendo lo que hacemos, organizándonos en nuestros espacios y redes comunitarias”, agregó el dirigente.
Este accionar del Gobierno contra los movimientos sociales es una muestra más de que el plan Milei no cierra sin represión. Quieren destruir todo vestigio de organización obrera y popular, todo germen de resistencia, para dejar tierra arrasada para el saqueo y la explotación.
“No se llevaron a nadie detenido”, contó Charly y agregó: ”El objetivo claro es demostrarnos el poder que tienen, amedrentarnos, pero no van a poder, vamos a seguir organizados”.