La CGT confirmó que no irá al paro nacional que propone Pablo Moyano. Además, apuestan a reforzar su diálogo con el gobierno nacional. El 5 de diciembre habrá un paro nacional de ATE.
20.11.2024.
En una reunión de la mesa chica de la Confederación General del Trabajo (CGT), celebrada en la sede de UPCN, los principales líderes sindicales decidieron que no convocarán a un paro general en el corto plazo. A pesar de los reclamos del sector liderados por Pablo Moyano, los triunviros Héctor Daer y Carlos Acuña, junto a otros dirigentes, ratificaron su apuesta al diálogo con el gobierno de Javier Milei.
Un encuentro sin sorpresas
La reunión, que se extendió por unas tres horas, contó con la participación de figuras como Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (Uocra), Julio Piumato (Judiciales), Juan Carlos Schmid (Dragado y Balizamiento), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias), Sergio Romero (UDA) y Rodolfo Daer (Alimentación). Durante el encuentro, quedó claro que “la palabra paro no figura en nuestra agenda”, según una declaración que resumió la postura mayoritaria de la central obrera.
Cruces con el sector de Moyano
El sector liderado por Pablo Moyano había planteado la posibilidad de un paro nacional en diciembre, buscando presionar al gobierno frente a la situación económica y las demandas laborales. Sin embargo, los sectores dialoguistas con el gobierno, representados por la burocracia más fuerte de los “gordos” y el barrionuevismo, lograron imponer su postura de evitar medidas de fuerza y priorizar las posiciones dialoguistas.
Estos grupos consideran que es necesario mantener una relación con el gobierno ya que consideran que esto puede ser más efectivo para obtener resultados que un enfrentamiento directo. “No habrá ningún paro”, fue la consigna que marcó el tono del encuentro, reafirmando la estrategia de moderación.
La decisión refleja la fractura interna de la CGT, con una tensión persistente entre los sectores más confrontativos contra el gobierno y aquellos que optan por desmovilizar a la clase obrera. Mientras el ala moyanista insiste en la necesidad de endurecer la postura de la central obrera, los dialoguistas mantienen su compromiso con no generarle molestias al gobierno de Javier Milei.
Más allá de la burocracia
Quedó claro que por ahora, la CGT continuará apostando por reuniones con el gobierno y los grupos de empresarios, abandonando la radicalización de las medidas de fuerza y desmovilizando a la clase obrera. Sin embargo, la presión de los sectores más combativos, que no solo responden a Pablo Moyano, si no que muchos se organizan independientemente de las burocracias, podría generar nuevos debates en el futuro, especialmente si las negociaciones no arrojan resultados concretos.
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De momento hay una fecha de paro nacional, convocado por ATE para el próximo 5 de diciembre. Está claro que las medidas de fuerzas y planes de luchas continuaron por más que la burocracia de la CGT decida no hacer nada frente a estas políticas antiobreras del gobierno.
