¿Y en “Sé todo lo que quieras ser”. Ese fue el lema con el cual Barbie se promocionó en todo el mundo durante décadas. Frente a infinidad de muñecos bebés que nos enseñaban a ser madres y amas de casa, Barbie llegó para ser veterinaria, astronauta, patinadora y si, también un ícono de la moda hiper hegemónico y sexualizado. Ésta es la dualidad de Barbie como idea, y lo que ha convertido a una simple muñeca en un juguete amado y odiado, muchas veces al mismo tiempo por la misma gente.
Barbie, la película, va por el mismo camino. Esta película, que lee a la muñeca en clave feminista, generó furor y revuelo a nivel mundial. Pero…¿Es realmente un hito feminista como muchos afirman?
La película
La película de Barbie funciona en muchos niveles. El arte y las actuaciones son espectaculares, tiene muchos guiños para quienes son fans del cine. También hay una gran cantidad de muñecos y muñecas discontinuadas, que disparan la nostalgia y hacen sentir especiales a les fans de Barbie, la muñeca.
Ahora bien, con respecto a la cuestión del feminismo, la cosa se vuelve un poco más gris. Es cierto que Barbie trata temas que son centrales para el feminismo: qué es el patriarcado, la imposibilidad de ser mujer bajo el mismo, y el efecto negativo que el patriarcado tiene sobre las masculinidades. Una persona que está en contra de “la ideología de género”, como les gusta llamar al feminismo desde la derecha, se va a ir del cine extremadamente enojada al grito de “¿Alguien quiere pensar en los niños?”, y hay que reconocer que eso es siempre algo que a una la hace feliz.
Pero también es cierto que la película de Barbie tiene algunos problemas que no podemos pasar de largo. En primer lugar, si bien la película hace esfuerzos por representar una diversidad de cuerpos y razas, es verdad que está completamente ausente la representación LGTB en la película. De hecho, el personaje más “codificado” como LGTB, la “Barbie rarita”, es ridiculizado y aislado en el mundo Barbie, y su final tiene realmente gusto a poco. Asimismo, en una película que se ríe mucho de las críticas que Barbie y Mattel han recibido a lo largo de los años, este elemento está llamativamente ausente.
¿Qué pasa con el feminismo?
Ahora bien, la crítica central que se le puede hacer a la película tiene que ver con lo siguiente: después de enseñarnos lo dañino del patriarcado en el mundo real y cómo esto impacta en el Mundo de Barbie, después de ver los problemas de una sociedad que (a la inversa que la nuestra) era muy desigual, después de entender las exigencias ridículas que implican ser una mujer en el sistema en el que vivimos, el único personaje que termina en un lugar diferente al que empezó es la Barbie protagonista. Nada cambia realmente en el mundo Barbie, y por supuesto que nada cambia en el mundo real.
La película se ríe de esto, así como se ríe del pink washing de Mattel que no tiene una CEO mujer hace décadas, y de un número de cuestiones que logran incluir al público y generar una película divertida. Pero hay que preguntarse si el hecho de realizar esta crítica sin plantear ningún tipo de solución al problema, por más ficticia que sea, no termina siendo funcional al sistema mismo que la película critica. Hasta dónde el hecho de que Mattel se ría de que sus jefes son todos hombres vendiéndole sueños a las niñas es una crítica profunda, y hasta donde es un punto de fuga del descontento que va a permitir un resurgir de las ventas y las ganancias reconvirtiendo a Barbie en un ícono del feminismo, y dejando de lado todas las críticas que el feminismo le ha hecho durante décadas.
¿Y entonces…?
Como siempre, la cultura sigue siendo un campo de batalla. Y lo que quede de Barbie responderá al resultado de las cientas y miles de discusiones que se están dando al respecto en todo el mundo. Desde Resistencia Online nos sumamos a la batalla para recordar que si bien Barbie la película es una conquista del feminismo mundial, queda mucha lucha por delante para que el día de mañana tengamos una remake donde al final de la película tanto el mundo Barbie como el mundo real terminen siendo un lugar más justo e igualitario.
