En los 2000 surgió en EEUU que cambiaría para siempre la cara de la música. Dante Iraola relata en su columna para Resistencia Online cómo fue la historia del trap en el mundo y Argentina.
La historia del trap: los orígenes
El trap se remonta a 2005. En el Sur de EEUU, fundamentalmente en Atlanta, un grupo de jóvenes ser reunía en casas donde se compraba y consumía droga, y también se hacía música. Estas “trap houses” son la cuna del género que hoy conocemos como trap.
A mediados de los 2000s el rap estaba en su punto de mayor popularidad. Muchísimos jovenes de los sectores más marginados de la sociedad lo escuchaban en el marco de una crisis que se venía palpitando y explotaría en 2008. Estos jóvenes sobrevivían viviendo droga en los barrios, y usaban ese dinero para comprar algunos modestos equipos para hacer música y “salvarse”:
Estos jóvenes tomaron la crudeza de las letras del rap, los mensajes críticos sobre la vida en el barrio, y lo combinaron con los instrumentos más baratos que encontraron en el marco de la crisis y pobreza que vivían: sintetizadores y el llamado “808”. El plan era simple, y a la vez extremadamente complejo: vender drogas para ganar dinero, con el dinero comprar equipos, con los equipos hacer musica, y con la musica salvarse tal como hicieron referentes del género como Gucci Mane, Wacka Flock Flame.
El trap llega a latinoamérica
El Trap llega a latinoamérica de la mano de artistas de reggaeton que, fundamentalmente en Puerto Rico, toman las influencias del Trap norteamericano y lo fusionan con los ritmos caribeños. Así, encontramos canciones y artists como “Flow Cabron” por Arcangel y Tali o “Fronteamos porque podemos” por DeLaGetto, Daddy Yankee, Yandel y Ñengo Flow, y más adelante Bryan Mayers, farruko y Anuel.
Si bien los ritmos se modifican, hay algo que se mantiene: las letras siguen girando en torno a las mismas temáticas, y sigue manteniendo el género su fuerte mensaje sobre la marginalidad.
Argentina no fue la excepción, el trap empezó a pisar fuerte y a un nene de 13 años llamado Alejo se le ocurrió hacer una competencia de freestyle: así nació “El Quinto Escalón”. A esta competencia le iría muy bien, sus batallas en Youtube tendrían cientas de miles de reproducciones, abriendole el camino a la primer gran figura del trap argentino: el Duki.
Después de Duki vinieron decenas de artistas influyentes en el género: Dillom, BUHO, Hello Cotto, She Don’t Give Fo y muchísimos otros que cambiaron la música urbana argentina.
-Dante Iraola
-NR-
