En la última emisión de Resistencia Online entrevistamos a Gustavo Galeano. Obrero metalúrgico, delegado de base y conductor del programa de radio La voz del obrero, segmento dedicado a la lucha de los trabajadores.
“Fue una experiencia muy gratificante” recuerda Gustavo. En un principio, empiezan a armar la radio junto a otros delegados de base como un canal de comunicación con aquellos compañeros de fábrica a los que se les dificultaba llegar por razones de horario. “Y fundamentalmente por el dique de contención que ponía la empresa” sentenció, “que te impide muchas veces la llegada a los compañeros para impedir que uno lleve el debate y plantee la discusión de como tenemos que defendernos y como tenemos que pelear por nuestra organización y nuestro salario”.
Los primeros programas de La voz del obrero planteaban discusiones alrededor de cosas que ocurrían en la cotidianeidad de la fábrica. Con el correr del tiempo esos temas se vieron más relegados y se fueron volcando a una discusión político-sindical acerca de qué tipo de país tienen que plantearse los obreros. La voz del obrero se planta desde el clasismo. “Nuestra lucha es una lucha de subsistencia, pero también es una lucha por la libertad, por lograr una sociedad que termine con la explotación, con todo tipo de opresión”
Eduardo comienza su vida militante en la secundaria, producto de la caída del gobierno militar y el gobierno alfonsinista. Destaca su paso por el MAS en la lucha ferroviaria en contra de las privatizaciones.
Señala que algo que ocurría en los 90 y que esta agudizado ahora es la falta de organización obrera. “Tenemos sindicatos, tenemos agrupaciones, pero no hay organizaciones que expresen realmente los intereses de la clase obrera, ha pasado a ser un actor secundario en la lucha política. No hay dirigentes relevantes de la clase obrera que enfrenten las políticas patronales”. Gustavo cuestiona también al activismo, diciendo que la izquierda tiene un problema de autor referencialidad, más preocupados por intervenir para ver cuantos compañeros pueden ganar para su partido que en ver como se coordinan y se desarrollan organizaciones propias del movimiento obrero.
“Asumió un nuevo conductor que es Abel Furlan pero que plantea la misma política y los mismos objetivos que la anterior conducción: la rebaja salarial de forma constante”
“En metalúrgicos se dio un proceso de renovación de conducción” cuenta Gustavo, “se fabricó una especie de congreso que destituyera a la antigua gestión [NdE: Antonio Caló], asumió un nuevo conductor que es Abel Furlan pero que plantea la misma política y los mismos objetivos que la anterior conducción: la rebaja salarial de forma constante”.
Gustavo relata que aún hoy deben seguir actuando de forma semiclandestina, rescatando algunas enseñanzas que todavía no se hicieron carne en la vanguardia obrera. “Recuperar las enseñanzas del sindicalismo de liberación, del sindicalismo clasista que plantea la organización de la clase obrera no solamente para pelear por el salario sino pelear para la construcción de una sociedad más justa, una sociedad sin explotados ni explotadores, una sociedad socialista”.