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    El 9 de julio, una fecha para pensar la independencia

    Un 9 de julio pero de 1816 se aprobaba en la ciudad de Tucumán la declaración de independencia de las Provincias Unidas en SudAmérica. Esta fecha es utilizada para celebrar la independencia nacional de Argentina, pero auqnue conmemoramos nuestra idependencia política, hoy estamos frente a un enorme retroceso en nuestra soberanía económica. Por ello es más importante que nunca repasar nuestros orígenes para comprender hacia dónde vamos.

    Los inicios de la Revolución

    En 1810, tras conocerse la noticia de la caída de la Junta Central de Sevilla a manos de las tropas de Napoleón, estalló en Buenos Aires la Revolución del 25 de Mayo  que destituyó al virrey Cisneros y lo reemplazó por la Junta Provisional de Gobierno. Sin embargo, la Revolución de Mayo y la formación de la primera junta no fueron más que el comienzo de un largo proceso de emancipación.

    Primer Triunvirato, intregado de Chiclana, Sarretea y Paso

    La Revolución de Mayo había sido en un principio un fenómeno meramente local, pero no tardaría en extenderse al resto de los territorios del virreinato. En diciembre de ese año se conformó la Junta Grande que incorporaba a la junta ya existente a representantes de las demás provincias. Como nuevo órgano de gobierno se crea en 1811 un poder ejecutivo integrado por tres personas, conocido como Primer Triunvirato. Este estaba originalmente compuesto por Feliciano Antonio Chiclana, Manuel de Sarratea y Juan José Paso

    La lucha por la Revolución era esencialmente una guerra civil dentro del virreinato, ya que el nuevo gobierno con sede en Buenos Aires y las provincias que se le fueran sumando debían hacer frente a los realistas, leales al Rey, que provenían desde el alto Perú. En este marco las presiones hacia el Triunvirato para que proclame oficialmente una independencia fueron creciendo.

    Pese a la aparente victoria de los moderados tras la muerte de Mariano Moreno y la imposición de Saavedra, el ala más radical de los revolucionarios pudo reagruparse y ganar fuerza con la formación primero de la Sociedad Patriótica y luego de la Logia Lautaro en 1812, dirigida por Juan Martín de Pueyrredon, José María de Alvear y José de San Martín, este recién llegado de España. Ante la inactividad del Triunvirato Juan José Paso renuncia y es remplazado por Pueyrredon. No obstante, al poco tiempo un golpe de estado organizado por dicha logia pone en el poder al Segundo Triunvirato, integrado por Nicolás Rodriguez Peña, Antonio Álvarez Jonte y Juan José Paso.

    El Segundo Triunvirato convocó para 1813 a una gran asamblea nacional con el objetivo explícito de declarar la independencia. La conocida como Asamblea del Año XIII no llegó a cumplir dicho cometido pero sí aprobó los símbolos patrios (bandera, escarapela, himno, el escudo) y sancionó la ley de libertad de vientre, con la cual los hijos de esclavos ya no lo serían. 

    La escarapela fue establecida en 1812 para usarse, junto con los otros síbolos patrios, como distituvo político y militar contra los realistas.

    Centralistas y federalistas

    A la hora de elegir los diputados que integrarían la asamblea emergió una disputa respecto a la organización que el nuevo Estado tendría. Mientras que los revolucionarios de Buenos Aires sostenían que la representación provenía de la Nación y abogaban por un Estado centralizado, la Banda Oriental (actual Uruguay) y la provincias del litoral, dirigidas por José Gervasio Artigas, afirmaban que la representación provenía de los diferentes pueblos de cada provincia y defendían un Estado federalista. Por esa razón se le prohibió a los diputados artiguistas integrar la Asamblea del Año XIII.

    Debido a esta irreconciliable ruptura entre Buenos Aires y Montevideo se formó en 1814 la Liga de los Pueblos Libres, integrada por Santa Fe, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos y la Banda Oriental.La nueva federación declaró su independencia como estado el 29 de junio de 1815 bajo el nobre de Unión de los Pueblos Libres.

    José Gervasio Artigas, líder de los federalistas orientales

    A principios de 1814 en Buenos Aires, la Asamblea del Año XIII aprobó un nuevo gobierno que remplazaría al Triunvirato, el Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, o Directorio. A diferencia del anterior éste estaría integrado por una sola persona que concentraba la autoridad sobre todas las provincias. 

    La declaración de la independencia

    El Director Supremo José María de Alvear postergaba la formación de un congreso independentista mientras negociaba secretamente la incorporación del virreinato al imperio británico. Al conocerse esto,  y con el escándalo que generó fue reemplazado por Ignacio Álvares Thomas, quien convoca a dicho congreso.

    Así el 9 de julio de 1816 finalmente se reunieron en el Congreso de Tucumán los representantes de cada una de las Provincias Unidas: Buenos Aires, San Juan, Salta, Catamarca, Córdoba, (que acababa de pasar de bando), Jujuy, La Rioja, Mendoza, Santiago del Estero, Tucumás, Mizque, Charcas y Chichas (las tres últimas hoy pertenecientes a Bolivia). La ciudad de Tucumán fue elegida por ser el centro geográfico del virreinato, ya que las demás provincias pedían que no se realizara en Buenos Aires.

    El Congreso de Tucumán discutió sin llegar a acuerdo la forma de gobierno del nuevo Estado (república o monarquía constitucional) y nombró como nuevo Director Supremo a Pueyrredón y aprobó la declaración de independencia. Dicha declaración fue publicada para conocimiento del pueblo en español, quechua y aymara. En ella se declaraba que las provincias debían:

    …romper los violentos vínculos que los ligaban a los reyes de España, recuperar los derechos de que fueron despojados, e investirse del alto carácter de una nación libre e independiente del rey Fernando séptimo, sus sucesores y metrópoli.

    El 19 de julio se amplió la declaración del acta aclarando que la independencia debe ser de cualquier dominio extranjero

    Acta de independencia de las Provincias Unidad en Sud América

    Después de la declaración

    Los dos estados nacientes no durarían demasiado. La Unión de los Pueblos Libres colapsó en 1820 ante la invasión de los portugueses desde el actual Brasil. El mismo año la autoridad central del Directorio desapareció tras la Batalla de Cepeda el 1 de febrero, en la que los caudillos Estanislao López y Fransisco Ramirez, de Santa Fe y Entre Ríos respectivamente, atacaron Buenos Aires.

    Tras esto se inició un largo período en que las provincias se mantendrían autónomas una de otra, firmando alianzas y pacto mientras se enfrentaban entre sí. No sería hasta la sanción de la Constitución de 1853  y la incorporación definitiva de Buenos AIres en 1862 que la República Argentina se volvería a reunificar.

    En la actualidad estamos ante una de las más terribles entregas de nuestra soberanía por parte de las oligarquías nacionales e internacionales. Deprimirnos o resignarnos no nos hará más lbres, eso no es lo que hicieron los revolucionarios forjadores de nuestra patria. Debemos trabajar y luchar para defender nuestra soberanía nacional y construir una nueva y auténtica independencia.

     

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    1 COMENTARIO

    1. 1) La SINTESIS me resultó bastante ajustada a los hechos y circunstanciada. Un dato no menor es que el Acta original de la Independencia -la realizada en castellano- y que traía un chasquis (transporte de correo a caballo) le fue robada a esa persona en Pccia. de CORDOBA que, en ese entonces fluctuaba o “bamboleaba” entre el Congreso de TUCUMAN -con injerencia de porteñistas de Buenos Aires casi absoluta y el Congreso de los Pueblos Libres (“artiguista” que pretendían un gobierno realmente FEDERAL en contraposición al congreso de TUCUMAN respecto del cual los bonaerenses aceptaron hacerlo en TUCUMÁN por presión del resto de las Pcias. de que lo conformaron -13 en total, incluída Buenos Aires-pero que en la práctica resultó absolutamente centralista, TAL COMO LO SIGUE SIENDO Y ACOTADO A LO QUE ACTUALMENTE CONOCEMOS COMO Ambito Metropolitano de Buenos Aires, una especie de semicírculo -LA PLATA -QUE NO EXISTÍA EN 1816-, CAÑUELAS, LUJAN., CAMPANA.

      2.- Además entiendo que hubiera sido interesante que lo que se llamaba “pueblo” en realidad eran las personas acaudaladas de cada Provincia, con mínimas excepciones, y la manifiesta participación de la curia de la iglesia católuica apostólica romana que se reservó el derecho de ser religión del Estado y que se le solventen monopólicamente sus gastos de los más diversos y hasta con la prohibición de ser presidente si no se practicaba esa religión como también del poder militar que se iba conformando

      3.- ¿Cómo realizo trámite para aumentar aporte mensual

      Saludos cordiales

      Luis Oscar SALOMON

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